En un comunicado, Fitch, que también ha elevado de »C» a »B» la calificación de emisor a corto plazo, explica que esta modificación del »rating» responde a la confirmación oficial de que el 96% de la deuda en manos de los acreedores privados aceptará una quita y al canje inicial de los 177.000 millones de euros en bonos bajo la legislación griega.
La agencia, que ya había anunciado con anterioridad que elevaría el rating tras la quita, cree que el canje de la deuda y las pérdidas impuestas a los acreedores privados han mejorada de forma «significativa» el perfil de la deuda de Grecia y han reducido los riesgos recurrentes de dificultades en el corto plazo para hacer frente al vencimiento de la deuda.
Aún así, la agencia considera que persisten riesgos «significativos y materiales» debido a que aún existen un nivel de endeudamiento «muy elevado» y a los «profundos desafíos económicos» a las que se enfrenta Grecia, como refleja el grado de especulación otorgado a la nueva calificación.
«Sin embargo, en opinión de Fitch, hay un margen limitado de seguridad para el servicio de la deuda con los nuevos valores en un horizonte de 12 a 24 meses, lo que se refleja en la perspectiva estable», añade Fitch.