Se trata del segundo paquete de sucursales bancarias que este fondo ha puesto a la venta. Los activos se han vendido de forma individual y en pequeños lotes.
Las oficinas se reparten en Madrid, Barcelona, Galicia, Asturias, Andalucía, Aragón y Castilla-La Macha, y se han transaccionado a precios de entre 100.000 y 3,5 millones de euros.
CB Richard Ellis, que junto a Cushman & Wakefield se ha encargado de la comercializar las oficinas, considera que el «éxito» de esta operación radica en el hecho de que los compradores podrán cobrar un alquiler seguro y a largo plazo (35 años con un plazo mínimo de 25 años de obligado cumplimiento) y a la «garantía» de tener como inquilino al Sabadell.