Según ha informado este lunes en un comunicado, esta semana abrirá su octava panadería en Londres, y ésta, se le sumarán este mismo mes dos nuevos locales en Italia, uno en Roma y otro en Sulmona.
Con estas inauguraciones y las previstas para los próximos meses (seis en total), la compañía acabará el año 23 establecimientos en el extranjero: nuevo en Reino Unido, cinco en Estados Unidos, siete en Italia y dos en Portugal.
Para Granier, el negocio internacional supone en la actualidad un 15,5% de su facturación global con unos ingresos de 7,3 millones de euros en 2017.
Con las nuevas aperturas, la previsión es crecer este año cerca de un 90% y alcanzar unas ventas netas en el extranjero de 14 millones de euros.