El fabricante estadounidense de refrescos, The Coca-Cola Company, obtuvo en 2011 un beneficio atribuido de 8.572 millones de dólares (6.540 millones de euros).
Es un 27,4% menos que los 11.809 millones de dólares (9.010 millones de euros) que ganó en el ejercicio precedente. Según la compañía, en el resultado influye la adquisición de una embotelladora en Estados Unidos.
Por su parte, las ventas de la compañía con sede en Atalanta alcanzaron los 46.542 millones de dólares (35.512 millones de euros), un 32,5% más que los 35.119 millones de dólares (29.796 millones de euros) que ingresó en el año anterior, mientras sus volúmenes aumentaron un 5%.
En concreto, la facturación de Coca-Cola mejoró un 11% en Eurasia y Africa y un 4% en Europa, mientras que las ventas crecieron un 14% en Latinoamérica y un 84% en Norteamérica. Asimismo, la facturación de la compañía aumentó un 11% en la región del Pacífico.
El presidente y consejero delegado de la multinacional, Muhtar Kent, destacó que la empresa ha obtenido unos resultados financieros «en línea con sus objetivos a largo plazo», con incrementos trimestrales del volumen y los ingresos de sus cinco áreas geográficas.
«Aunque creemos que la volatilidad del mercado global continuará en el corto plazo, la amplitud de nuestra presencia en todo el mundo y la fortaleza de nuestras marcas crean un negocio resistente que fue construido para momentos como este», añadió.