El vicepresidente de la Comisión y responsable de Asuntos Económicos, Olli Rehn, instó ayer a todos los acreedores a sumarse a la quita de deuda griega puesto que las condiciones del canje, presentadas en febrero, no mejorarán.
La oferta de canje de bonos planteada por Atenas con el beneplácito de la Unión Europea supondrá una quita (deuda perdonada) del 53,5% (107.000 millones de euros), en los bonos soberanos griegos y una pérdida de valor real en las carteras de deuda soberana de Grecia de entre el 73% y el 74%.
Para Rehn, «es importante» que «todos los inversores» reconozcan la importancia de una «plena participación» en esta quita para que la economía griega pueda seguir avanzando.
El mensaje, lanzado en un comunicado a inversores griegos, europeos e «internacionales», pone de manifiesto que la participación del sector privado es «indispensable» para asegurar la sostenibilidad futura de la deuda helena y, por extensión, supone «un contribución decisiva a la estabilizad de la zona euro en su conjunto».
En este sentido, el comisario europeo ha celebrado el anuncio realizado por una treintena de entidades europeas que han confirmado su participación en la quita de deuda, ya que se trata de acreedores «clave» y, con su respaldo, ponen de manifiesto el «creciente apoyo» a este plan.
RESUELTA UN 40% DE LA DEUDA
Los bancos que ahora dieron luz verde a la oferta, representan un 39,3% del total de los bonos en manos del sector privado. Sin embargo, se necesita resolver positivamente un 66% de la deuda, para que el plan de salvamento sea viable. Sólo así, Atenas podría activar las llamadas Cláusulas de Acción Colectiva (CAC) que obligarían a aceptar la »quita» (porcentaje de deuda que se perdona), incluso a los acreedores que se hubieran negado.
Los bonos serán sustituidos por nuevos títulos griegos por un valor del 30,5 % de los actuales, de 20 años de vencimiento a contar desde 2023. Además habrá otros con un valor del 15 %, emitidos por el Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera (el fondo de rescate), con un vencimiento a dos años. De hecho, gran parte del nuevo rescate acordado por la UE se destinará precisamente a financiar este canje.
Las 30 entidades que han acordado participar en el canje son grandes nombres de la banca y grupos de inversión: Ageas, Allianz, Alpha Bank, AXA, Banque Postale, BBVA, BNP Paribas, CNP Assurances, Commerzbank, Credit Agricole, Credit Foncier, DekaBank, Deutsche Bank, Dexia, Emporiki Bank of Greece, Eurobank EFG, Generali, Greylock Capital Management, Groupama, HSBC, ING, Intesa San Paolo, KBC, Marfin Popular Bank, Metlife, National Bank of Greece, Piraeus Bank, Royal Bank of Scotland, Societe Generale y Unicredit.
En un comunicado, los miembros del PCIC muestran todo su apoyo a los recientes acuerdos alcanzados por Grecia, las autoridades de la eurozona y el Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre el nuevo programa de ajustes y refinanciación para la economía helena, incluidos los términos relativos al intercambio voluntario de la deuda en manos del sector privado.
Asimismo, inciden que ni el Comité ni ninguno de sus miembros realiza cualquier recomendación ni ofrece asesoramiento a cualquier otro acreedor privado susceptible de participar en el canje de deuda. «Cada tenedor debe tomar sus propias decisiones sobre si participar o no en la oferta de canje de deuda basándose en sus intereses particulares y en los consejos de sus propios asesores», añaden.