En concreto, el organismo dependiente del Ministerio de Economía y Empresa tratará de colocar bonos a tres años, con cupón del 0,05%; a cinco años, con cupón del 0,45%; obligaciones con fecha de vencimiento en 2025 y cupón del 1,60%, y una obligación más a diez años con cupón del 1,40%.
Para determinar la evolución del coste de financiación, la referencia en los bonos a 3 años en el interés marginal del -0,132% de la subasta del pasado 2 de agosto, mientras que en los bonos con vencimiento en 2022 es el tipo del 0,208% de la puja del 19 de abril.
En el caso de las obligaciones con vencimiento en 2025, la referencia es el interés marginal del 2,279% de la subasta del 2 de julio de 2015 y el de las obligaciones a 10 años el tipo del 1,456% de la subasta celebrada el pasado 6 de septiembre.
En la última subasta de deuda a largo plazo, celebrada por el Tesoro Público el 6 de septiembre, se emitieron 4.920 millones de euros, dentro del rango medio previsto, pero ofreciendo rentabilidades más altas en las cuatro referencias.
El organismo colocó el martes 2.000 millones en letras a tres y nueve meses, en el rango medio de la horquilla prevista, pero cobró menos a los inversores que en la emisión de agosto.
Con la subasta de este jueves el Tesoro cierra el calendario del mes de septiembre con cuatro operaciones de financiación, y no volverá a someterse al escrutinio de los mercados hasta el jueves 4 de octubre, cuando ofrecerá bonos y obligaciones, emisión a la que le sucederán la del martes 9 de octubre (letras a 6 y 12 meses), el martes 16 de octubre (letras a 3 y 9 meses) y el jueves día 18 (bonos y obligaciones).