En comparación con el tercer trimestre del año anterior, el PIB de Alemania registró un crecimiento del 1,1%, frente a la expansión del 2,3% del trimestre anterior.
«El ligero descenso trimestral del PIB se debió principalmente a la evolución del comercio exterior», explicó la oficina estadística alemana, después de que las exportaciones bajaran en el tercer trimestre y aumentaran las exportaciones respecto a los tres meses precedentes.
En cuanto a la demanda doméstica, se observaron señales mixtas, puesto que la formación bruta de capital fijo en maquinaria y equipamiento, así como en la construcción fue superior a la del trimestre anterior, mientras que el gasto de los hogares disminuyó. Por su parte, el gasto final en consumo del Gobierno fue ligeramente superior al observado en los tres meses anteriores.
En el tercer trimestre, Alemania contaba con 45 millones de ocupados, cifra que representaba un incremento de 556.000 trabajadores o el 1,3% en un año.