Mango ha encendido la polémica en Francia por una traducción errónea del español al francés de la denominación «esclava», utilizada en la descripción de una colección de pulseras y un collar en su página web francesa. Aunque en español el término «esclava» está aceptada en joyería como un tipo de brazalete, en francés no existe esta acepción del término, lo que ha generado el revuelo y ha forzado a Mango a disculparse por el error y el malentendido.
«Lamentamos el error en la traducción. Los servicios responsables ya han sido advertidos y harán la corrección inmediatamente», ha asegurado Mango en su cuenta oficial de Twitter, poco antes de informar en un comunicado que ya había procedido al cambio de la denominación en su web francesa. «Mango no ha querido en ningún caso herir la sensibilidad de nadie y ya ha realizado las modificaciones oportunas en todas sus plataformas», añadió en el comunicado.
Una petición por internet lanzada por las actrices francesas Aissa Maiga y Sonia Rolland y la columnista Rokkaya Diallo, titulada «La esclavitud no es moda», había recogido el lunes casi 3.000 firmas. «Estas joyas en forma de cadenas hacen de la esclavitud un objeto de fantasía y de moda», aseguraron las tres autoras de la petición.
Las asociaciones francesas SOS Racisme y Cran exigieron también que Mango retire de la venta su colección de joyas llamada en francés style esclave.