Desde su salida a bolsa en 2011 a 3,5 euros por acción, la cadena de supermercados DIA se ha convertido en la empresa española más perseguida por los grandes inversores mundiales. Su modelo de negocio basado en el descuento se ha convertido en un perfecto refugio anticrisis. El fondo escocés Baillie Gillford ha realizado la última gran apuesta por la compañía, con la compra de otro 1,3% del capital por 70 millones de euros.
Baillie, un fondo con más de 100 años de vida y que gestiona 90.000 millones de libras, ya afloró en noviembre del año pasado una participación del 3% que fue construyendo poco a poco. Con las nuevas compras, ya controla el 4,28% de DIA, un paquete valorado en 168 millones de euros que le convierte en el principal inversor institucional del grupo.
En los últimos meses, DIA ha visto como en su capital han desembarcado algunos de los fondos más reconocidos del mundo. Un gigante como Black Rock -la mayor gestora del planeta- agrupa el 3% del capital del grupo cuyo consejero delegado es Ricardo Currás, mientras que la gestora del banco danés Danske Bank ha adquirido un 2,5%. Otros grandes como Invesco o F&C Asset también tienen participaciones, aunque no tan relevantes.
Los grandes inversores que han entrado en el capital de DIA tienen razones de sobra para estar satisfechos por el resultado de su apuesta. El valor acumula una ganancia del 20% en un primer tercio de año muy díficil para la bolsa española, que vuelve a pagar las dudas sobre la evolución de la economía y cuyo sector financiero está cada vez más en entredicho. Y en los últimos doce meses, la revalorización supera ya el 70%. DIA, con su modelo »low cost», viaja en otro vagón bursátil, acumulando recomendaciones de compra por parte de los analistas.
La propia compañía esta realizando una apuesta muy fuerte por el valor de sus acciones. El pasado cuatro de abril, adquirió 800.000 títulos propios a un precio de 5,63 euros por acción. Las compras, realizadas después de la peor racha del valor en bolsa este año -acumuló hasta once sesiones consecutivas sin subir- llevan la autocartera del grupo por primera vez por encima del 5%.
A los precios actuales de bolsa, este paquete tiene un valor en el mercado de 200 millones de euros, más de lo que DIA va a ingresar por la venta de su negocio en Turquía. La noticia fue recogida el viernes con euforia por los inversores. La acción del grupo español subió un 3,8% hasta los 5,78 euros, por encima del precio de compra de las últimas acciones propias y a un paso de los máximos históricos en bolsa del pasado mes de febrero, en los seis euros por acción.
Venta de Turquía
DIA contaba con casi 1.100 tiendas en Turquía que reportaban alrededor del 4% de las ventas totales del grupo. Una cifra que no respondía a las expectativas y que ha terminado por sacar a Turquía del grupo de países llamados a liderar la expansión internacional del grupo junto a Brasil, España, Portugal, Argentina y China.
El año pasado, DIA obtuvo un beneficio neto atribuido de 157,9 millones de euros en 2012, un 60,4% más respecto al año anterior. Las ventas en España, que en otros gigantes como Inditex han empezado a realentizarse, crecieron un 5,4%. Las ventas brutas bajo enseña alcanzaron los de 11.679 millones de euros.