El presidente francés, François Hollande cumplió en mayo un año desde su elección con el triste récord de ser el presidente que registra la mayor cuota más baja de popularidad desde 1958 y la creación de este tipo de sondeos en Francia.
Nunca antes un presidente había registrado un nivel tan alto de descontento como Hollande en el mes de abril: un 74% y antes de cumplir un año como Jefe de Estado. Ni en sus más bajos momentos, sus predecesores alcanzaron ese nivel.
Nicolas Sarkozy, en abril de 2011 obtuvo un porcentaje de descontento del 72%, pero ya llevaba cuatro años en la presidencia. Anteriormente, Jacques Chirac, en junio de 2006 marcó un 70% de desaprobación.
François Mitterrand, anterior socialista que habitó el Elíseo entre 1981 y 1995, ‘tocó fondo’ en términos de popularidad en diciembre de 1991, cuando fueron un 65% de ciudadanos los que se manifestaron insatisfechos con su gestión.
Ninguno de los tres otros presidente de la V República, ni Charles de Gaulle (1958-1969), ni Georges Pompidou (1969-1974), ni Valéry Giscard d’Estaing (1974-1981), llegaron nunca ni a marcar un 50% de insatisfacción. El nivel más bajo de popularidad fue para De Gaulle en marzo de 1963, con un 40% de descontentos; para Pompidou, en diciembre de 1969, un 35%; y Giscard d’Estaing, un 47%, en marzo de 1981.
PEQUEÑA REMONTADA EN LAS ÚLTIMAS SEMANAS
Con todo, en los últimos dos meses, el presidente ha experimentado una pequeña remontada. En junio, el nivel de descontentos se rebajó al 67%
Sigue siendo, para ‘casi un recién llegado’ un porcentaje excesivamente alto. Los expertos explican la caída libre de Hollande en los sondeos porque se ‘vendió’ como el candidato del cambio. Sin embargo, en muchos aspectos, pero especialmente en el económico, el Gobierno ha dado una imagen de promesas incumplidas, impotencia, e inacción.