La necesidad de vigorizar o revigorizar la industria es el nuevo debate puesto sobre la mesa cuando parece que lo peor de la crisis ha pasado. Los países desarrollados vuelven a apostar por el sector secundario porque se han dado cuenta que un país con una industria fuerte tiene una economía más sólida y con mejores empleos. España, ha sido el último país en sumarse a la tendencia. El pasado mes de septiembre, José Manuel Soria, ministro de Industria, presentó la “Agenda para el fortalecimiento de la Industria en España”. Según cálculos de su ministerio, “la industria es la que realiza el mayor esfuerzo en innovación e I+D (48,3% en 2012) y el peso de las exportaciones industriales en el PIB, representan más del 20%”.
La APD pretende estos días, profundizar en el debate, con la celebración de un congreso que celebra en Bilbao.
Los APD valora la iniciativa del Gobierno aunque los expertos creen que el plan del Ejecutivo no será suficiente para aumentar el peso de la industria en el PIB español, del 13% al 17%. El plan de Soria, “incide en fomentar la I+D y en mejorar la financiación de pymes”. Se articula en torno a diez líneas:
1. Estimular la demanda de bienes industriales con efecto multiplicador en la economía
2. Mejorar la competitividad de los factores productivos clave.
3. Asegurar un suministro energético estable, competitivo y sostenible dentro de la UE
4. Reforzar la estabilidad y uniformidad del marco regulatorio español.
5. Incrementar la eficiencia y la orientación al mercado y a los retos de la sociedad de la I+D+i.
6. Apoyar el crecimiento y la profesionalización de las PYME españolas.
7. Adaptar el modelo educativo a las necesidades de las empresas.
8. Aumentar el peso de la financiación no convencional en las empresas industriales.
9. Apoyar la internacionalización de las empresas industriales y diversificación de mercados.
10. Orientar la capacidad de influencia de España a la defensa de sus intereses industriales.
Muchos aseguran que nos encontramos en los albores de una nueva la Cuarta Revolución Industrial. La iniciativa se suma a la agenda Europea que también quiere dar un impulso a la industria en toda la Unión Europea. Antes que Europa, Japón, Estados Unidos y el Reino Unido ya han puesto en marcha planes similares con numerosos puntos en común.
Según han publicado en varios artículos, Julián Pavón y José Luis de la Fuente O’Connor, hay en todos esos planes varias directrices comunes:
-Una transición ecológica y energética.
– La digitalización y la explotación de las bases de datos.
-Una economía de la salud y los alimentos.
-Tecnologías y fábricas adaptadas a demandas diferenciadas.
-La reducción de barreras al comercio.