Ebioss, ahora en el ojo del huracán, es una de las compañías del Mercado Alternativo Bursátil (MAB) que se preparan para dar el salto al mercado continuo. Forma junto a Masmóvil Ibercom, Carbures y Eurona el grupo de empresas que han decidido cambiar de estatus para evitar el contagio de Gowex, la empresa presidida por Jenaro García que ha puesto al pie de los caballos al mercado para medianas empresas
El efecto dominó que se produce en las compañías del MAB cada vez que se desatan las especulaciones sobre una compañía es inmediato. Ayer, mientras Ebioss se desplomaba algo más de un 28%, otros miembros del mercado alternativo pagaban también los platos rotos. Por ejemplo, Carbures se dejó algo más de un 5%, Catenon cerca de un 9% y Neuron en torno a un 2,5%.
Desde el estallido del caso Gowex, las empresas intentan marcar distancias con la compañía de wifi. En un comunicado emitido tras el estallido del escándalo, Masmovil recordaba que sus cuentas están auditadas por una de las grandes –KPMG- y la propia Ebioss ratificaba como auditora a Baker & Tilly, recordando que es la la séptima auditora a escala mundial de las compañías cotizadas.
Los esfuerzos de las compañías para desmarcarse de Gowex no han impedido que las especulaciones se hayan cebado con las empresas del MAB. Antes de que se desataran las especulaciones sobre Ebioos por la compra de TNL, el mayor valor del MAB, Carbures, también ha sido presa de las dudas. Desde el nivel de los 36 euros alcanzado a mediados de junio, el valor ha caído hasta el entorno de los 19 euros.
Un proceso en el que además del caso Gowex ha influido un informe de la casa de análisis Black Bird en el que fijaba en julio un precio objetivo de 6,5 euros por acción y que ponía en duda las previsiones de crecimiento tanto de ventas como de beneficios del grupo fabricante de piezas en fibra de carbono para sectores como la aeronáutica, la automoción y la obra civil.
La esquizofrenia que viven los valores del MAB desde el estallido del caso Gowex se deja ver en la tremenda división de opiniones que sus empresas suscitan entre los analistas. Por ejemplo, BBVA ha llegado a establecer un precio objetivo de 41 euros por acción para Carbures, un nivel similar al que marcan otras casas de análisis como Beka Finance y Renta 4.
Precisamente, esta última asegura hace poco más de 10 días que la caída del valor en los tres últimos meses está “injustificada” y aseguraba que Carbures presenta «una gran oportunidad de entrada» a los precios actuales. Al contrario que Black Bird, Renta 4 aseguraba que «confiamos en que la directiva cumpla con los objetivos del plan estratégico 2013/16”. Luces y sombras de un MAB bajo sospecha.