El BBVA calcula en 1.360 millones de euros el impacto que tendrá en sus cuentas el nuevo esfuerzo de saneamiento que establece la reforma financiera aprobada el viernes por el Consejo de Ministros, y anuncia que la absorberá totalmente este año.
En una comunicación remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, el banco asegura que asumirá este impacto «con holgura, gracias a la recurrencia y resistencia de nuestros resultados».
Indica también que este esfuerzo no impactará en su política de dividendos, ni en las medidas que ha puesto en marcha para cumplir con los nuevos requerimientos de capital que establece la Asociación Bancaria Europea (ABE).
El pasado viernes, el Consejo de Ministros aprobó una reforma financiera que obligará a la banca española a provisionar 50.000 millones para sanear su exposición a los activos inmobiliarios.
El 8 por ciento de esta cifra, 4.000 millones de euros, corresponde al BBVA, de los que 2.800 millones se cargarán con cargo a resultados. Dado que el banco había anticipado esta medida, el impacto final será de 1.360 millones de euros.