Si se cumplen las previsiones más optimistas del Gobierno y AENA se vende al precio máximo previsto de 55 euros por acción, el grupo sería valorado en 8.250 millones de euros. Los bancos que dirigen la operación (Santander, BBVA Goldman Sachs, Morgan Stanley y Bank of America Merrill Lynch) van a poner toda la carne en el asador para convencer a los inversores de que deben apostar muy fuerte por una de las operaciones del año en Europa.
La gran batalla empieza este lunes día 26 de enero, cuando el equipo gestor de la compañía iniciará el road show (ronda de presentaciones de la compañía a los principales inversores institucionales) que llevará a las grandes capitales financieras mundiales: Londres, Nueva York, París y Boston, además de Madrid.
Estas citas son claves para las compañías que salen a bolsa, porque el contacto con los potenciales compradores es directo. Estos últimos aprovechan sus encuentros (dependiendo del tamaño del inversor son en grupo o privados) para resolver sus dudas sobre las compañías. En paralelo, arranca también el período de formulación de peticiones de compra, que se extiende hasta el próximo 3 de febrero.
Será un día después cuando arranque el período de solicitudes vinculantes (es decir, en firme) de compra de acciones de AENA, que finalizará el viernes día 6, antes de la asignación definitiva de las acciones al tramo minorista, al que inicialmente se destina el 9% de la operación. El resto corresponde a inversores profesionales (que pueden llegar a quedarse con el 90% de las acciones que salen a la venta) mientras que un 1% está dirigido a empleados del grupo.
Será el lunes día 9 cuando se fije el precio definitivo de la operación, una vez que los inversores institucionales (cuyas peticiones de acciones deberán superar los 100.000 euros) hayan puesto sus cartas sobre la mesa anunciando cuánto quieren comprar y a qué precio. El día 10 se adjudicarán las acciones y el miércoles 11 el gestor de los aeropuertos españoles debutará en el parqué.
En total, el Estado va poner en el mercado 38,18 millones de acciones de Aena, que se pueden ampliar hasta los 42 millones de títulos. Con el cierre de la OPV, por el 28% del capital, se ha habrá cerrado el proceso de entrada de inversores privados en el grupo que arrancó el año pasado, cuando el Gobierno eligió a Ferrovial, a Corporación Financiera Alba y a el fondo TCI como miembros del núcleo duro de la compañía, de la que se repartieron el 21% de las acciones.