Una semana más, el gol estaba escondido en el banquillo del Barcelona y llegó en las postrimerías del encuentro. Si en Villarreal fue Sandro el que dio la victoria al conjunto de Luis Enrique, ante el Athletic fue Neymar el que encontró la portería.
Volvió a acertar Luis Enrique con los cambios para ofrecer gol a su equipo. Aunque está controlando los partidos y generando un volumen de ocasiones más que aceptable, no está teniendo facilidad para encontrar el gol. Las dos últimas victorias han llegado en los últimos once minutos y gracias a hombres que salieron desde el banquillo, todos asistidos por Messi.
Contra el Villarreal, el tanto de Sandro llegó en el minuto 82 en una jugada rota. Igual que el primero de Neymar, posibilitado tras un error de Laporte. Con hombres como Munir enchufados saliendo en la alineación titular, a Luis Enrique también le funcionan los revulsivos.