Tanto el club, como el presidente y Dietmar Hopp, máximo accionista, que no eran conscientes de la existencia del equipo han pedido disculpas a la afición, ante una acción que el empleado calificó de "humorística". "Nos alejamos de esa acción y pedimos disculpas a todos los aficionados al fútbol si su experiencia se vio afectada", declararon.
La policía de Heidelberg, que han solicitado la entrega del aparato, está investigando el incidente después de que un seguidor del Dortmund pusiera una denuncia por daños físicos tras un encuentro en el que el juego no se vio afectado por esta acción.