No se vive un buen momento en Anoeta. Su equipo, la Real Sociedad, está tan sólo un punto por encima del descenso, en el puesto 17º. Pero eso no es lo que preocupa más a la afición Txuri-urdin, ya que la temporada acaba de comenzar y si se mira bien la tabla de clasificación, están a cinco puntos del Sevilla, el séptimo clasificado. Las cosas están muy apretadas ahí abajo. Sin embargo, el conjunto de Philippe Montanier está mostrando en este inicio una falta preocupante de gol, y una racha malísima fuera de casa. El entrenador francés es cuestionado en cada partido que disputa la Real, sobre todo por sus alineaciones y por no saber contrarrestar los cambios tácticos de los técnicos rivales.
El de Vernon vino a sustituir al míster uruguayo Martín Lasarte, que consiguió el ascenso en la temporada 2009/2010 y la permanencia en Primera División en la siguiente campaña para La Real. Sin embargo, Lasarte fue cesado a favor de Montanier, debido principalmente al mal juego del equipo y los pésimos resultados fuera de Anoeta. Ese año la Real sólo sumó tres victorias a domicilio. Así, el técnico francés llegó al club erreala con la misión de mejorar el juego a domicilio del equipo, pero la Real sigue con dificultades y la afición Txuri-urdin está empezando a perder la paciencia. Además, la derrota ante el Espanyol en la última jornada liguera en Anoeta ha encendido aún más la mecha, que corre por las gradas del estadio de San Sebastián en forma de pitos y silbidos contra Philippe Montanier.
LA REAL SÓLO HA CONSEGUIDO UN PUNTO FUERA DE CASA
Desde que el técnico francés se hiciese cargo del club donostiarra la temporada pasada, el equipo ha logrado 15 puntos de 72 posibles en los partidos lejos de Anoeta, acumulando un pésimo balance de 3 victorias, 6 empates y 18 derrotas. Además, viene de perder ante el Córdoba en la Copa del Rey y con la derrota frente al Espanyol en casa suma su segundo partido perdido de forma consecutiva. Esto, sumado al nombre del rival, que tampoco había logrado ningún partido fuera de Cornellá, está agotando la paciencia de la afición. Tan sólo un punto han logrado lejos de casa, donde tienen un porcentaje del 80% en derrotas esta temporada, y ha recibido goles en todos sus partidos. También es preocupante la falta de gol del equipo, pues han sido en cuatro los partidos de esta temporada en los que se han quedado sin marcar gol. Por todo esto, con diez goles a favor y quince en contra, la Real se encuentra en el puesto 17º en la clasificación.
MONTANIER NO GUSTA A LA AFICIÓN
Tras la derrota contra el Espanyol, ya se está hablando del posible cese del técnico normando. Anoeta lo pide, y lo demostró antes y después del partido, e incluso en el mismo, silbando y pitando el juego del equipo, pero sobre todo al entrenador francés. Montanier es criticado desde hace tiempo (en la temporada pasada también se habló de su cese, pero ganaron en el partido clave al Málaga 3 a 2) por una afición que no comprende los pésimos resultados lejos de casa y no comparte las alineaciones de Philippe. Y es que el técnico txuri-urdin en ocasiones hace cosas extrañas. En el último partido liguero, por ejemplo, puso a Estrada de extremo siendo lateral, por lo que Xabi Prieto jugó de mediapunta y el Chori Castro no salió como titular (Zurutuza y Griezman están lesionados). Además, colocó a Carlos Martínez de lateral, y aunque no es su puesto natural, fue uno de los mejores jugadores del partido. Por último, con empate a cero en el marcador y jugando en casa, sacó a Javi Ros, medio de corte defensivo, por Markel Bergara (que se lesionó), teniendo a Rubén Pardo en el banquillo.
«PREFIERO PREOCUPARME DE LO QUE OCURRE EN EL CAMPO»
Tras el partido contra el Espanyol, Montanier hizo unas declaraciones obviando la pitada que recibió en el partido, en el pre-partido y en el post-partido. Aunque declaró que «los jugadores no merecían perder este encuentro«, Philippe no quiso «hacer ningún comentario de las pitadas«, pues según él, prefiere preocuparse del fútbol en el campo. La dimisión del entrenador puede darse esta semana, pues aunque el míster esperaba «una reacción tras el partido del Córdoba», lo cierto es que ésta no se dio, y los nervios están por las nubes en Anoeta. Sin embargo, Montanier quiso dejar claro que el partido contra el conjunto periquito «no lo tenían que haber perdido, porque no lo merecían», quizá para apaciguar unas aguas que ya se muestran turbias y movidas en el club de San Sebastián.