España vuelve a estar de nuevo de enhorabuena después de que la selección de balonmano se proclamara el pasado domingo campeona del mundo tras imponerse de manera contundente a Dinamarca en la final 35-19. Uno de los grandes ‘culpables’ de este éxito ha sido Valero Rivero, que atiende a TeInteresa tras haber dirigido al equipo con maestría desde el banquillo.
El técnico es el primero que se sorprendió de la contundencia con la que los ‘hispanos’ se impusieron en el Palau Sant Jordi: «Estamos hablando de una potencia y era imposible pensar que pudiéramos ganar por 16 goles de diferencia. Yo pensaba que podíamos ganar. Quería que el partido fuese largo. Es decir, que llegáramos al final con opciones».
Valero entiende que una de las claves del choque estuvo en que Dinamarca quizás dio por ganado el partido antes de jugarlo. «Yo creo que ellos pensaban que iban a ganar el partido con relativa facilidad. Encontraron que no podían conseguir gol con facilidad y no supieron contrarrestar ni nuestra defensa, ni nuestra actitud, ni nuestro ataque», explica.
Por ello, no tiene dudas de que el partido del pasado domingo se seguirá recordando durante los próximos años: «Seguro que es para la historia porque es la primera vez que sucede una cosa así. Para la historia seguro». Rivera indica que los pilares en los que se cimentó el éxito han estado en la portería y en una intensa defensa. «No hemos tenido ningún partido que se haya decidido en los últimos minutos y eso tampoco es normal. Hay que estar muy satisfecho y creo que ha tenido que ver con la defensa, la portería, el haberse comportado como un equipo, saber jugar sabiendo cuáles son nuestros puntos fuertes en ataque», remarca.
Una vez que ya han pasado unos días desde que acabara el torneo y ha dado tiempo a analizar los partidos con más frialdad, Valero no duda a la hora de señalar cuál fue el peor momento del campeonato: la primera mitad de los cuartos de final contra Alemania. «La media parte contra Alemania en la que perdíamos por dos fue el momento más duro del torneo. La defensa 5-1 que planteé no dio resultado, me equivoqué en el planteamiento, pero luego con el 6-0 levantamos el partido», recuerda.
ESPAÑA SE SACA LA ESPINA CLAVADA TRAS LOS JUEGOS
El Mundial, además, ha servido para que el equipo se saque la espina que tenía clavada tras los Juegos Olímpicos, donde cayó en los cuartos de final en el último segundo contra Francia: «La manera en la que caímos en los Juegos fue cruel. El lugar, el momento, la forma fue extraordinariamente cruel, así que yo creo que este equipo se merecía un campeonato como éste».
Por este motivo, los jugadores celebraron el triunfo como se merece, a lo grande. «Fue una noche muy feliz, celebramos aquí en Barcelona con nuestras familias y la verdad es que fue también una noche muy bonita, obviamente», comenta Valero.
Lo mejor de este equipo es su juventud, por lo que va a poder seguir dando alegrías a España. «Lo bueno de este equipo es que, menos Alberto Entrerríos que se retira, todos los jugadores pueden estar en los Juegos por calidad y cantidad. Eso es lo mejor, que se ha hecho una renovación clara y que además se queda campeón del mundo», analiza.
«A FINALES DE FEBRERO PUEDE HABER UNA NOTICIA SOBRE MI FUTURO»
Una de las preguntas que se hace todo el mundo en estos momentos es si Valero Rivera seguirá al frente de España. Sin embargo, el técnico aún no ha pensado qué va a hacer: «Es un tema que quiero hablar con la gente que me ha apoyado, con la gente que valoro, mi familia. Con tranquilidad, porque quiero decidir bien». «Habrá una noticia en un mes o por ahí. A finales de febrero o por ahí, más o menos», añade.
Una de las cosas que no le ha gustado últimamente es que se le haya criticado por convocar a su hijo Valero para el Mundial en detrimento de Juanín García. «Yo entiendo perfectamente que cada uno haga su selección. Ante eso no puedo hacer ni decir nada. Lo que no entiendo es que quieran hacer daño».