El gran anhelo de Simeone al finalizar la pasada temporada era mantener a Courtois, por encima de Diego Costa y Filipe. El técnico argentino quedó realmente preocupado cuando le informaron de la vuelta del belga al Chelsea. En la secretaría técnica del Calderón se pusieron a buscar portero y eligieron a Oblak. Moya, segunda opción para la portería.
Pero el mallorquín ha aprovechado el gran rendimiento que dio desde el inicio de la pretemporada y ya nadie duda de sus capacidaes y de que es el titular. Despuntó en el Mallorca, titubeó en el Valencia y se hizo un portero de garantías en el Getafe para confirmarse en la portería del Atlético de Madrid.
Cristiano Ronaldo marcó desde el punto de penalti para empatar y el Atlético se desvaneció en el Bernabéu durante unos minutos. El equipo rojiblanco demostró una desorganización poco habitual en el sistema defensivo y el Real Madrid acosó la portería de Moyá, que fue el mejor del Atlético en la primera mitad con diferencia.
Gracias a las paradas del portero rojiblanco, el Atlético pudo mantener el empate en el marcador al descanso. Tiago había adelantado a los de Simeone minutos antes en una acción que supuso los pitos del Bernabéu a Casillas. Moyá no tuerce el gesto, no duda. Mantiene la calma bajo la portería y sabe transmitir tranquilidad a sus defensas.
Está demostrando un nivle muy alto en este inicio de temporada y le está ganando la partida a Oblak. El portero mallorquín está haciendo olvidar a Courtois con sus paradas, algo que parecía complicado cuando el belga se marchó este verano.
Su exhibición en el Bernabéu comenzó con una gran parada a disparo de Bale. El galés probó de falta directa desde la frontal del área y el portero voló para evitar lo que por entonces suponía el empate con una mano dura. Después tiro de reflejos para reaccionar y sacar un cabezazo de Benzema que iba dirección a portería.
El Atlético empezó a crecer gracias a sus manos salvadoras y con la ayuda de los cambios de Simeone, el Atlético comenzó a sentirse cómodo sobre el césped del Bernábeu y el gol de Arda decidió el partido.