Luis Enrique sigue en su empeño de revolucionar el once del Barcelona y en el partido contra el Apoel de Nicosia realizó hasta nueve cambios con respecto al encuentro frente al Athletic, el último antes del estreno en la Champions. Las alineaciones del nuevo entrenador del Barça empiezan a ser dignas de análisis. En tres partidos de Liga y uno de Liga de Campeones ya ha utilizado a 21 jugadores de titular y solo Messi y Munir resisten a las rotaciones. Para algunos, Luis Enrique se excedió en cambiar casi de arriba a abajo el once en la Champions y achacan esta decisión al mal juego y el pobre resultado que ofreció el equipo en el Camp Nou. Una victoria ajustada (1-0) que provocó algunos pitos de la grada. Pero el técnico no cede y cuando se le preguntó por esta revolución comentó: “He sido conservador”.
Lo tiene claro el entrenador asturiano, que se encarga de recordar su mensaje y su filosofía: “Veintitantos jugadores seremos mejor que doce. Creo ciegamente en esta gestión del grupo”. Los resultados, de momento, están de su lado. Cuatro victorias y cero goles en contra. Lo que no se puede dejar de analizar es la variedad de su alineaciones. Ter Stegen, al igual que hizo Simeone con Oblak, fue titular en la portería. Claudio Bravo juega en la Liga. En la defensa ya han jugado de inicio Alves y Montoya (lateral derecho), Mathieu, Mascherano, Piqué y Bartra (centrales), Alba y Adriano (lateral izquierdo), Busquets, Samper, Rakitic, Xavi, Iniesta, Rafinha y Sergi Roberto (centrocampistas) y Messi, Neymar, Munir y Pedro (delanteros). Y todavía quedan por estrenarse Vermaelen y Luis Suárez.
Contrasta la apuesta en las rotaciones de Luis Enrique con la planificación de Ancelotti y Simeone. El entrenador del Real Madrid ha utilizado para estas tres primeras jornadas de Liga y el partido de la Champions ante el Basilea a 15 jugadores como titulares. La portería la no la ha movido y mantiene la confianza en Casillas. El once está más definido. En cuarto al ‘Cholo’, su rotación en el once pasa por utilizar a 16 jugadores como titulares. También ha utilizado a dos porteros, como Luis Enrique, pero mantiene su apuesta por un equipo base.
La explicación que ofrece Luis Enrique a esta gran variedad de onces, está en fomentar la competencia y que nadie se sienta indiscutible. Solo Messi y Munir parecen serlo. Es evidente que hay una clara apuesta por los jugadores de la cantera y que pretende, desde un principio, dejar claro que ha cogido el banquillo del Barcelona con la idea de no casarse con nadie. Jugadores como Xavi, Neymar, Pedro y Piqué, titulares en otras temporadas, ya no tienen el puesto garantizado. Es la ley de Luis Enrique.