«Estoy un poco nerviosa», dijo Caroline Wozniaki al confirmar su presencia en el Maratón más popular del mundo. La número 8 del tenis femenino está acostumbrada a pelear contra Serena, Sharapova, Halep o Ivanovic sobre la pista, pero el domingo 2 de noviembre tendrá que competir con más de 50.000 personas que se echan a las calles de Nueva York anualmente para recorrer los 42 kilómetros más apasionantes del »running».
Será una prueba muy exigente para Caroline, que gastará las últimas fuerzas que le quedan en las piernas antes de final de año una vez ha terminado la temporada tenística. Afirma que nunca ha corrido más de 20 kilómetros y su entrenamiento ha consistido en correr de «30 a 90 minutos en estos meses».
«Mi primer objetivo es acabar la carrera, no voy a forzar mucho para lesionarme. Empezaré muy lenta, esa será mi estrategia», dice confiada ante los medios mientras recoge el dorsal que le permitirá correr por las »Gran Manzana».
La tenista danesa estuvo acompañada en todo momento por varios chicos de la fundación »Team for kids», para los que recaudará dinero con su participación en la carrera. Estos fondos irán destinados a los niños que no tienen la posibilidad de practicar deporte regularmente. Sus programas atienden a más de 200.000 niños, con un mayor enfoque sobre chicos con sobrepeso. Wozniacki ha recaudado más de 77.000 dólares y la cifra no para de crecer.
Caroline lleva entrenando varios meses para la cita, pero en los últimos días está notando la tensión: «Una vez soñé que no podía acabar la carrera y que me tenían que recoger en silla de ruedas», bromeaba.