Fútbol y política siempre han estado muy unidos en Catalunya. Desde la época de la dictadura franquista la identidad entre el Barcelona y Catalunya ha sido más que evidente y en numerosas ocasiones el Camp Nou ha sido el escaparate más utilizado para las reivindicaciones nacionalistas.
Y eso que desde la entidad azulgrana siempre se ha mantenido un mismo discurso: «El Barcelona no es independentista, es catalanista». Esta máxima fue ya utilizada por Núñez, Gaspart o Laporta aunque fue este último el que mantuvo una postura más nacionalista.
Desde que llegó a la presidencia del Barcelona, Rosell ha defendido la creación de una liga europea integrada por los clubes más ricos del continente al estilo NBA.
Espejos donde mirarse
Esto le evitaría tener que decidir qué hacer en caso de producirse la independencia y tener que elegir entre jugar una liga catalana o seguir en la Liga española en una fórmula similar a la que permite al Mónaco disputar la liga francesa.
En Inglaterra tenemos otros tres ejemplos ya que el Swansea City, el Cardiff City y el Wrexham AFC de Gales, no disputan la Welsh Premier League (la liga más importante de Gales). Los dos primeros militan actualmente la Premier League, mientras que el Wrexham disputa la Premier Division de la Football Conference (quinta división inglesa).
Otro ejemplo es el Futbol Club Andorra, único club del Principado que también milita en competiciones españolas, incluida la Copa del Rey, desde los años 40 del siglo pasado. Desde 1948 hasta 1976 compitió en categorías regionales y en 1977 ascendió por primera vez a Tercera división.
Tres años después, en 1980 se proclamó campeón de la categoría ascendiendo a Segunda B. En la tercera categoría del fútbol español se mantuvo durante 17 años, con un paréntesis en la 1986/87, que militó en Tercera. La temporada 1988/89 fue subcampeón de su grupo, quedando a cinco puntos de conseguir el ascenso a Segunda. Actualmente milita en la Primera catalana (categoría inmediatamente inferior a la Tercera división).
Su mejor actuación hasta la fecha en la Copa del Rey fue en la temporada 1995/96, cuando alcanzó los dieciseisavos de final tras eliminar al Palamós y al Getafe, siendo eliminado por el Celta de Vigo.
«No tengo ninguna duda»
Dos días después de la Diada de 2012 y tras la »exaltación nacional» de aquel día Rosell fue preguntado sobre qué pasaría en caso de independencia de Catalunya. El presidente azulgrana fue bastante claro: «No tengo ninguna duda de que el Barça seguiría jugando en la Liga de la LFP. Como el Mónaco en Francia. No tengo ninguna duda».
Unas declaraciones que se contraponían a lo que por entonces defendía el presidente de la Federació Catalana de Futbol, Andreu Subies, que defendía que clubes como Barcelona o Espanyol disputaran una competición catalana, teniendo como máximos rivales a los clubes de Segunda división, Sabadell y Girona. Algo que, parece, a Rosell no le convence. La pérdida económica y de competitividad sería tan grande que es un riesgo que no está dispuesto a asumir.
Este mismo año, pocos días después de la Diada, Rosell afirmó que cualquier pueblo debía tener «derecho a expresarse», al preguntársele sobre la Via Catalana por la independencia. El presidente azulgrana añadió que le parecía «perfecta» toda manifestación democrática en cualquier lugar del mundo y por cualquier motivo.
Preguntado por si el Barça era independentista, como decíamos, lo negó aunque, a continuación dijo que el club es una entidad catalana y catalanista que «siempre defenderá» al pueblo de Catalunya.
El catalanismo del Barcelona
Desde el »Catalonia is not Spain» de hace años a la participación del fuedo azulgrana en la Via Catalana celebrada el pasado 11 de septiembre con motivo del día de la Diada de Catalunya, la presencia nacionalista en el Camp Nou ha sido una constante.
Como escribía antes, los presidentes azulgranas, al menos los tres más destacados de los últimos 30 años, han defendido el catalanismo azulgrana sin llegar a pisar el terreno pantanoso del independentismo.
De todos, el que fue más allá, como decíamos fue Joan Laporta. Sin embargo, no fue hasta que salió de la presidencia del Barcelona cuando Laporta radicalizó su postura o, al menos, la hizo más visible.
Cuando lideró el partido Solidaritat Catalana per la Independència en las elecciones autonómicas de 2010 su discurso tomó un cariz más radical. «Creo que la independencia de Catalunya no se pide, se declara», llegó a decir.
Sin embargo, este discurso no le sirvió para mantenerse en la política ya que, tras las últimas elecciones celebradas en noviembre de 2012, perdió los 4 escaños obtenidos en los comicios de dos años antes.
Mantenerse al margen, díficil
Sandro Rosell, su sucesor en la presidencia del Barça, también ha mantenido el discurso «catalanista», aunque en la movilización en la Diada de 2012 participó activamente, aunque como él mismo apuntó «a título personal» junto a su familia: su padre Jaume, gerente azulgrana durante la presidencia de Agustí Montal en los años 70, su mujer, sus hijas y sus hermanos
Ya este año, Rosell no participó en la Vía Catalana aunque tenía la excusa perfecta: no pudo participar porque se encontraba en Ginebra (Suiza), en una reunión extraordinaria de la ECA, la Comisión de los grandes clubs europeos, de la que es vicepresidente.
Su familia, no obstante, sí participó. Su esposa, Marta Pineda acudió al Estadi con una bandera catalana.
Sin embargo, esto no le ha impedido, por ejemplo acudir a la entrega de los Premios Nacionales del Deporte celebrada el pasado 2 de diciembre en el palacio de El Pardo, en un acto presidido por la Reina Doña Sofía y los Príncipes de Asturias, en los que se reconocía a los mejores deportistas de 2012.
Allí recibió un premio de mano del príncipe Don Felipe de Borbón, para después posar en la foto de familia como uno más. El presidente estuvo acompañado por los directivos Carles Vilarrubí, Eduard Coll y Manel Arroyo.
A pesar de sus esfuerzos, Rosell y el propio club azulgrana no han podido quedarse al margen y se han identificado con la corriente independentista que vive Cataluña.
Incluso en el último clásico ante el Real Madrid, una pancarta en uno de los fondos pedía la consulta, pese a la declaración del presidente de alejar el club de cualquier credo político.
Pues bien, la consulta ya está planteada así como la fecha para su realización. Queda algo menos de un año. Veremos cual es la postura azulgrana de aquí a la celebración del referedum.