Rus, en un comunicado, ha indicado que actualmente el consumo «ha bajado un 50 por ciento y si no hay consumo es muy difícil, no se puede pagar el IVA, se despide a la gente de las tiendas, no se crea ilusión, no se pagan los alquileres, etc».
Por ello, considera que «si entra en vigor el plan el rendimiento del dinero se cuadruplicará situándose por encima de los 120.000 millones de euros, un dinero con el que inmediatamente los ayuntamientos pagarían a los bancos, con lo que la presión de la deuda por intereses bajaría». «El plan dará oxígeno y las empresas podrán pagar a los trabajadores», ha agregado.
El presidente de la Diputación confía en que «con los 1.000 millones que recibirán los ayuntamientos, a partir de ahora, si las cuentas se hacen bien, no va a haber ningún problema».