El balance que los populares de la capital hacen de los 12 primeros meses de Gobierno de Ahora Madrid es negativo sin peros. Según el PP, “hoy Madrid tiene más paro que hace un año; se ampara a quien incumple la ley; se justifican, por ejemplo, las ocupaciones y usurpaciones en viviendas y locales convirtiendo a la capital en una ciudad sin ley; y el sectarismo inunda la acción del gobierno de Carmena”.
“Un año perdido para Madrid”, así lo considera el Partido Popular. El año de la transparencia que anunciaba Carmena se ha convertido, para los populares, en el año de la opacidad, de la falta de información acerca del patrimonio de algunos concejales del equipo de Gobierno y de las dificultades para acceder a los detalles de contratos menores.
Sobre los contratos grandes también se ha pronunciado el PP. Acerca de la Operación Chamartín, considera que es “un proyecto de consenso que ha sido enterrado a bravas por el Ayuntamiento y sustituido por otro inviable”. En el mismo tono valora también la inversión perdida para Madrid que el Grupo Wanda iba a invertir en la Operación Campamento.
Pocas o ninguna son las buenas palabras que el día del primer aniversario de Carmena recibe del Grupo Popular de Madrid. Aunque Iñigo Enríquez de Luna, el portavoz adjunto del Partido Popular en el Ayuntamiento de la capital, considera que es menos sectaria que sus concejales. Enríquez de Luna se refiere a sectarismo más ideológico que económico, sacando a relucir la negativa de varios ediles de Ahora Madrid a votar en favor de la defensa de los Derechos Humanos en Venezuela. Es curioso, pero a pesar de sus diferencias, populares, socialistas y ciudadanos coinciden en sus criticas hacia el área de Cultura del consistorio.