Así, IU ha opinado que «la brutal campaña de acoso a la que el Ayuntamiento de Madrid somete a los movimientos que luchan por los derechos y contra la discriminación de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales ha llegado al punto de las multas y la prohibición de determinados eventos culturales que se celebran tradicionalmente en los días previos a la manifestación anual». * «La Concejalía que dirige Ana Botella pretende amordazar el acto reivindicativo más grande que vive la ciudad de Madrid mientras llena las calles de numerosos eventos de exaltación de la jerarquía católica o el militarismo. De este modo, queda latente la homofobia y transfobia de una derecha que mantiene el recurso a la Ley de Matrimonio entre personas del mismo sexo, así como su derecho a la adopción», añade el comunicado.
Así, IU ha defendido que «el espacio público es el lugar donde reivindicar esto» y, por eso, ha manifestado su «apoyo» a la utilización de la calle «como lugar de protesta y de expresión colectiva de una determinada idea, más aún cuando ésta va a favor de la igualdad».