Así se ha manifestado Cifuentes en declaraciones a los medios al término de una reunión con el consejero de Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid, Jesús Fermosel, en la sede de la Delegación, donde han analizado el plan de urbanización del Gobierno regional para la Cañada Real.
Preguntada al respecto, ha indicado que se han detectado familias o personas vinculadas a los clanes de la droga de la Cañada Real que se han instalado en una zona limítrofe entre Chinchón y Morata de Tajuña, «en algunos casos de manera legal». A este respecto, ha precisado que algunas de estas personas han comprado viviendas ya existentes y otras han construido viviendas «en zonas rústicas y que no cumplen con las normas urbanísticas».
«De momento, no se ha detectado ni se está produciendo nigún tipo de trafico de drogas ni en Chinchón ni en Morata de Tajuña y, desde luego, por parte de la Delegación de Gobierno, se va a impedir y se va a evitar que la problemática de drogas de Cañada Real se traslade a otro municipio», ha dicho.
Asimismo, ha agregado que, aparte de la presencia policial, «para impedir un tráfico ilegal de drogas, lógicamente hay que actuar con los ayuntamientos implicados». Según Cifuentes, la semana próxima se celebrará una reunión con los alcaldes, para ver que actuaciones van tomar ellos para hacer cumplir la normativa urbanística y «en definitiva poder derribar aquellas viviendas que estén fuera de la legalidad».