Según ha explicado a Europa Press, C’s Madrid contactó con él hace dos meses para pedirle estar en su candidatura regional. De hecho, el pasado 8 de abril presentó su excedencia voluntaria en el Cuerpo Nacional de Policía, ya que los agentes en servicio no pueden ser elegibles. «Me prometieron ocupar de los temas de seguridad e Interior en la Asamblea y iría entre los puestos 8 y 10», señaló.
Sin embargo, tras adelantar Europa Press la noticia de su incorporación a la lista naranja Alfredo Perdiguero fue acusado de haber realizado hacía tiempo el Twitter unas declaraciones supuestamente machistas.
«Hablé con el partido y me dijeron que estuviera tranquilo, que seguían contando conmigo. Pero me preocupé cuando vi un mensaje de Albert Rivera en Facebook que negaba que yo fuera candidato», apuntó.
Fue el pasado jueves 16 cuando, siguiendo la versión del sindicalista policial, recibió una llamada del coordinador de Ciudadanos en Madrid, César Zafra, indicándole que desde Barcelona «no veían» su incorporación.
Al día siguiente Perdiguero recibió otra llamada, esta vez del presidente de Vox y candidato a la Presidencia regional, Santiago Abascal, que le mostró su apoyo en dichas declaraciones y señaló que en su programa planteaban medidas a favor de la violencia intrafamiliar, tal y como él defiende.
Tras una charla presencial, el subinspector ha acabado fichando por Vox, como así aparece publicado en el Boletín Oficial de la Comunidad, concretamente en la quinta posición. «Yo soy una persona con principios y creo que Vox defiende valores que yo defiendo en este asunto, en familia, en custodia compartida, seguridad y justicia, en la bandera y en el himno entre otros puntos», ha señalado.
Alfredo Perdiguero se presenta como «un técnico independiente», ya que no está afiliado a ningún partido y ha prometido «hacer una policía más democrática y menos politizada».
El hasta hace unos días secretario del Sindicato Independiente de la Policía Española (SIPE) –puesto que ha tenido que dejar para presentarse a las elecciones– niega el calificativo de «chaquetero».
«Es verdad que estoy decepcionado y hastiado con Ciudadanos porque si un partido que se dice regeneracionista y con un nuevo estilo a la mínima de cambio no me apoya frente a las críticas de una minoría de feministas no merece mis respetos ni que yo le represente», ha esgrimido.