En una sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, la Sección Primera exonera a Ana F.G., de nacionalidad colombiana, de los delitos de estafa y otro contra la integridad moral. La Fiscalía de Madrid pedía una pena de siete años de prisión.
Según el fiscal, la acusada fue contratada como empleada interna del hogar el día 1 de julio de 2005 por dos hermanas nacidas en 1923 y 1922. Además, se daba la circunstancia de que una de ellas se encontraba afectada de una enfermedad degenerativa medular que le impedía la movilidad, por lo que se encontraba postrada en una cama.
El fiscal sostenía que la procesada controlaba de manera íntegra la vida de las perjudicadas, llegando una de ellas a autorizarla en una de la cuentas bancarias. Así se produjo un importante número de operaciones de retirada de fondos que iban a parar en metálico a la procesada.
Según el fiscal, llegó a convencerlas de que las hermanas recibieran ingresos de diversos familiares mediante transferencias internacionales. Haciendo uso de estas artimañas, Ana llegó a apoderarse de, por lo menos, 239.754,53 euros, todo ello al margen de los salarios recibidos, así como del destino final de los muebles y las joyas de las ancianas, cuyo paradero se desconoce.
El día 28 de noviembre de 2009 se produjo un incendio en la citada vivienda, falleciendo como consecuencia una de las ancianas. La acusada se encuentra privada de libertad por la presente causa desde el día 26 de julio de 2010.