La última película del fallecido Paul Walker, figura de las películas ‘Rápido y Furioso’. Trata sobre cómo la criminalidad afecta a los sectores más bajos de Detriot, en donde el las armas, las drogas y la extorsión, son el pan de todos los días.
De igual forma, aborda también como la desigualdad fomentada por las autoridades, tengan su máxima expresión en un muro que separa las mansiones de los barrios marginales de esta ciudad de Michigan, Estados Unidos.
El agente secreto Damian Coller tiene la dura batalla de luchar contra la corrupción, así como Lino, que también debe estar fuera de todo vestigio de violencia, de la que formaba parte.
Ambos deben luchar contra el narcotráfico, reflejado en la figura de Tremain antes de que destruya la urbe y llegue el caos.
Dirigida por Camille Delamarre, se espera que esta película reviente taquilla por la imagen y el legado de Paul Walker, muerto en un accidente de tráfico en noviembre de 2013.