Cerca de mil bomberos, apoyados por medios terrestres y aéreos, combaten hoy los dos grandes incendios que permanecen activos en los distritos de Setúbal y Santarém, en el centro de Portugal.
En ambos casos, el fuego presenta «señales de comenzar a ceder», según declaró a la prensa la portavoz de la Autoridad Nacional de Protección Civil, Patrícia Gaspar.
En total, son ocho los incendios que continúan activos esta mañana, aunque solo esos dos están considerados de «grandes dimensiones» o «preocupantes».
Como medida de precaución, las autoridades locales mantienen cortadas varias carreteras de la zona, incluida una nacional.
El fuego que más medios moviliza es el declarado el miércoles en el término municipal de Abrantes, en Santarém, donde 731 bomberos combaten las llamas, apoyados por 240 vehículos y 8 aviones, entre los que se incluyen dos españoles y uno marroquí.
En el de Grândola, en el distrito de Setúbal, trabajan cerca de 250 bomberos, apoyados por 74 vehículos y dos helicópteros.
Según la portavoz de Protección Civil, para las próximas horas no se esperan grandes cambios en las previsiones meteorológicas, marcadas por altas temperaturas en el centro del país, acompañadas de vientos con rachas fuertes.
No obstante, la situación a esta hora es mejor que la de ayer, día en el que, según el balance ofrecido hoy por Gaspar, se superaron los 200 focos en todo el país.
Uno de ellos obligó incluso a cortar el tráfico de la autopista A1, que une las ciudades de Lisboa y Oporto, a su paso por el término municipal de Mealhada, en el distrito luso de Aveiro (centro).