Mercurio, el planeta más cercano al Sol… tiene agua. Nuevas observaciones de la nave espacial Messenger respaldan de forma convincente que alberga abundante hielo y otros materiales volátiles congelados en sus cráteres polares. Science Express certifica el hallazgo al igual que la NASA, no sin asombro, porque al estar tan cerca del sol parecía un lugar poco probable para albergar hielo.
Pero como la rotación del planeta es casi cero muchos puntos de él nunca ven la luz. Los expertos habían pensado hace décadas en la posibilidad de que en Mercurio existiera agua, pero esta percepción recibió un fuerte impulso en 1991, cuando el radiotelescopio de Arecibo en puerto Rico detectó machas brillantes en los polos. La Nave Mariner 10 en 1970 había ubicado algunos de estos puntos y todo coincidía: ¡eran los mismos cráteres! Pero había pocas pruebas, pocas evidencias y aún quedaba mucho por conocer del planeta. Un nuevo viaje en 2011 confirmó las mismas manchas y ahora Messenger señala que es hielo lo que se esconde en esos cráteres.
Las mediciones de hidrógeno no ofrecen dudas: «La capa enterrada tiene un contenido de hidrógeno con hielo de agua casi pura». 10 millones de pulso láser han sido necesarios para hacer una topografía del planeta. El hielo de estas áreas estaría cubierto por una capa térmicamente aislante. Los materiales orgánicos que se han encontrado podrían pertenecer a asteroides y cometas.