La solución a la alergia al cacahuete podría estar a la vista. La cura, según una investigación, sería dar a los niños precisamente eso, cacahuete. La investigacion, financiada por el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas en el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos, ha descubierto que proporcionar pequeñas cantidades de proteína de cacahuete a niños muy pequeños reducía la incidencia de la condición hasta los cinco años, comparados con los menores que no recibían la proteína.
El estudio ha sido publicado en la New England Journal of Medicine, y se ha calificado como «un hito». Así, la publicación ha llamado a la aplicación de nuevas normativas sobre el consumo de cacahuetes para niños y recomienda que algunos infante entre los cuatro y ocho meses en riesgo de padecer la condición deberían comenzar a recibir el tratamiento.
La alergia al cacahuete es una condición a veces muy seria, que provoca una reacción corporal conocida como anafilaxia que constriñe las vías respiratorias y puede ser mortal. Las personas alérgicas tienen que ser extremadamente precavidas ya que incluso una mínima traza del producto puede provocar una reacción.
El estudio, en el que ha participado King»s College London, estudió a 640 niños de entre 4 y 11 meses de un hospital londinense que tendrían propensión a la condición. Se les dio comida con cacahuete tres veces a la semana. Para cuando llegaron a los cinco años, menos de un 1% de los niños que recibieron cacahuetes eran alérgicos, comparado con el 17,5% de los que no recibieron.
En los últimos años los médicos recomendaban no dar cacahuetes a niños pequeños, algo que podría haber provocado el aumento en el número de alérgicos, apunta The Guardian, por lo que los investigadores han pedido cambiar las recomendaciones.