Según han informado fuentes municipales a Europa Press, tras comprobar que no había daños estructurales en el edificio y una vez retirados los escombros provocados por el fuego, los vecinos de la calle Avet número 2 del barrio de Sant Ildefons ya han podido regresar a sus domicilios.
A pesar de eso, continúa la consternación en el barrio por el incendio que ha acabado con la vida de una niña de siete años, además de provocar heridas a dos de sus hermanos y a su padre.
Siete vecinos de los pisos superiores han sido ingresados en varios hospitales por inhalación de humo.
La tarde de este martes, numerosos vecinos se han acercado a la zona para ver los efectos de las llamas en el bloque, donde el Ayuntamiento mantiene una patrulla policial de vigilancia.