En rueda de prensa en el Parlament, han recordado que presentaron un escrito pidiendo no declarar que no ha sido respondido, y han señalado que no quieren colaborar en un procedimiento judicial «iniciado por un movimiento de extrema derecha» como Manos Limpias.
Boada y Milà han señalado que, si el juez desestima su petición y les obliga a ir a declarar pese a que ellos no presentaron denuncia, acudirán a los juzgados «forzados» y no responderán a ninguna de las preguntas que les pueda plantear Manos Limpias.