Según han informado este miércoles ambos cuerpos policiales, los arrestados sometían a condiciones de trabajo "indignantes" a los empleados, de nacionalidad paquistaní, india y nepalí, sin hacerles contrato ni cotización.
La policía, junto al servicio de Inspección de Trabajo de Catalunya, llevaban desde marzo investigando y finalmente registraron ocho restaurantes y dos locutorios en los distritos de Sant Martí, Sants-Montjuïc, Les Corts y Eixample.
Algunos de los locales carecían de licencia de actividad y otros tenían una licencia pero regentaban otro tipo de negocio, llegando en un caso a abrir un supermercado cuando solo se disponía de la licencia de depósito de libros, y además, en algunos de estos se encontraron productos alimenticios caducados.
A los detenidos les atribuyen delitos contra los derechos de los trabajadores, usurpación de estado civil y estafa, además de que les levantaron actas por las infracciones administrativas.
A los 12 trabajadores explotados se les abrió un expediente sancionador en relación a la Ley de Extranjería.
En la operación, han intervenido policías del Grupo segundo de la Ucrif, de la Brigada Provincial de Extranjería y Documentación, en colaboración con agentes de la Guardia Urbana y funcionarios del Servicio de Inspección de Trabajo.