La muestra se recogió entre el 20 de octubre y el 5 de noviembre de 2015 — después de las elecciones catalanas y antes de las generales– y se basa en 1.050 encuestas telefónicas: 783 en Barcelona, 98 en Girona, 60 en Lleida y 109 en Tarragona.
En concreto, a la pregunta ‘¿Pensando sobre la independencia de Catalunya, usted está totalmente a favor, bastante a favor, bastante en contra o totalmente en contra?’ un 33,1% de los encuestados está totalmente a favor y un 24,1 bastante a favor, mientras que un 10,1 está bastante en contra y un 21,9% está totalmente en contra.
Un 46%,1% de los encuestados está muy interesado en el tema de la independencia, un 29,3 está bastante interesado, un 11,9% lo está poco y un 11,8 no está interesado.
El lugar donde los encuestados están más dispuestos a sumarse a una conversación sobre el asunto es en una comida familiar, donde el 33,2% estaría muy dispuesto a unirse a la conversación, un 28,5 estaría bastante dispuesto, el 16,4% poco y el 19,9 nada.
El segundo lugar es en un restaurante con amigos: el 30,3% de los encuestados se manifiesta muy dispuesto a tratar la independencia, el 29,6 bastante dispuesto, 18,1% estaría poco dispuesto, mientras que el 18,9% no lo estaría nada.
Las redes sociales son los espacios donde más reticentes son los encuestados para unirse a una conversación sobre la independencia catalana.
SITUACIÓN POLÍTICA
Sobre la ‘Situación política general de Catalunya’, un total del 59,4% de los encuestados la ve ‘mala’ o ‘muy mala’, entre varias opciones de respuesta.
El 38,4% cree que es ‘mala’ el 25,5% que es ‘buena’ y el 21% considera que es ‘muy mala’, el 9% no la ve ‘ni buena ni mala’, el 2,5% la considera ‘muy buena’, y un 2,6% dice que no lo sabe.