La pieza, que es clave en el conjunto de obras atribuidas al Taller d»Erill la Vall, ha sido recuperada gracias a un proyecto de colaboración entre el MNAC y el Vinseum que ha permitido restaurar y exponer la obra «en diálogo con las esculturas atribuidas al mismo taller», como algunas tallas del grupo escultórico »Davallament de la Creu» que se exhiben en el museo nacional.
Elaborada en madera de peral, la pieza –97,8 x 29,2 x 33,5– presenta diversos restos de policromía y procede de la colección donada en 1972 al museo de Vilafranca por Manuel Trens, quien la adquirió en un anticuario de la localidad leridana de Tremp.
Este dato, junto a sus rasgos estilísticos y sus medidas, hace pensar que la escultura procede de la iglesia de alguna localidad de los Pirineos occidentales catalanes, y tradicionalmente, ha estado relacionada con las tallas de la Vall de Boí y la Val d»Aran.
La talla representa a una figura masculina prácticamente frontal con un águila en los pies, por lo que puede ser identificada como el evangelista Juan con su tributo habitual y, dado que acostumbra a ir acompañado por el resto de evangelistas, «no se puede descartar» que formara parte de un conjunto escultórico más amplio.
El grupo escultórico del »Davallament de la Creu» procedente de la iglesia de Santa Eulàlia d»Erill de Vall ha dado lugar al término Taller d»Erill la Vall, que designa a un conjunto de tallas en madera procedentes de iglesias de Erill la Vall, Durro y Santa Maria de Taüll.