En un comunicado recogido por Europa Press, WWF advierte de que se trata de una especie protegida por las leyes españolas y por la Directiva Hábitats al sur del Duero.
También ha remitido un escrito a la ministra de Agricultura y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, en el que piden información sobre la identidad de quien ha autorizado la muerte del ejemplar de cánido.
WWF ha solicitado a la ministra que paralice la muerte de los otros tres lobos que está previsto abatir en Ávila y Salamanca ya que quiere que se aplique «el principio de precaución», ya que su muerte «vulnera claramente las leyes».