Los hechos se remontan al año 2013, cuando una menor burgalesa fue sometida a varias sesiones de exorcismo en Valladolid, con un «exorcista legítimamente nombrado», según reconoció en su momento el Arzobispado de Burgos.
Estos hechos llevaron a declarar ante la jueza del Juzgado número 2 de Burgos al sacerdote que supuestamente practicó estos rituales, Jesús H.S, un cura de la localidad vallisoletana de Medina de Rioseco, y a I.C.S.V, catequista que pertenece a la parroquia de Nuestra Señora del Rosario de Burgos.
La investigación llevada a cabo por el Juzgado 2 de Burgos, tras la denuncia de seis tíos maternos de la joven, ha sido para determinar si la menor, que ya ha cumplido los 18 años, sufrió un delito de lesiones ya que se encontraba en tratamiento psiquiátrico cuando se produjeron, supuestamente, los exorcismos.