Así, la caída de Cantabria contrasta con el incremento de cuatro décimas en el precio de la vivienda usada en el conjunto del país, que se colocó en 1.586 euros el metro cuadrado.
Sin embargo, en Santander el precio se incrementó en medio punto entre junio y julio, con lo que el precio del metro cuadrado se situó en 1.919 euros.