Esta actualización es la primera que se hace desde que a principios de julio se dieran a conocer los primeros tramos que se tipifican como especialmente peligrosos debido al número de accidentes graves registrados, el número de accidentes en general y la información de la velocidad media de circulación en estos tramos.
Desde hoy la web de la Dirección General de Tráfico recoge esa actualización de los tramos de carreteras convencionales, especialmente peligrosos, en los que se intensifica la vigilancia para reducir la siniestralidad.
Según ese listado, en Cantabria hay 19 tramos considerado de especial peligrosidad por la DGT. Además del de Reinosa-Brañavieja, se encuentran el tramo que une Barreda con La Revilla, por Santillana del Mar; de Viveda a Suances; de Cabezón de la Sal a Comillas; de Santillana del Mar a Ongayo o de Astillero a Santoña, por Pedreña y Argoños; y de Astillero a Selaya.
Asimismo, la DGT incluye en esos tramos el de Hoznayo a Galizano, por Cubas y Carriazo; de Beranga a Noja; de Los Corrales de Buelna a Puente Viesgo; de Reinosa a Corconte; de Cabezón de la Sal al Valle de Cabuérniga; de Pesués a Puentenansa; de Santander a Puente Arce; de Puente Arce a Requejada, por Miengo; de Maliaño a Puente Arce; de La Cavada a Ramales de la Victoria; y de Adal Treto a Bádames.