Siéntate, pon música de fondo bajita y concéntrate en lo que vas a leer porque nunca habrás deseado tanto que te crezca la barba como ahora. Y no es broma, cuando asimiles estas diez curiosidades entenderás por qué lucir pelo en la cara cual vikingo mola.
1. En el Antiguo Egipto la barba ya era un complemento de moda, como el que llevaba un collar o unas pulseras (vamos, como ahora). Entonces, las reñían y las trenzaban con hilos de oro.
2. La barba fue un símbolo de virilidad en Grecia, de ahí que la mayoría de las esculturas griegas lucieran vello facial. Véase el caso del Laocoonte, un hombre rudo con cuerpo esculpido con cincel (y nunca mejor dicho).
3. Según la Universidad de Boston un hombre invierte 139 días de su vida afeitándose.
4. Los hombres con barba, a los ojos femeninos, son más atractivos, más masculinos, más saludables y mejores padres. Lo dice la Universidad de South Walles.
5. Para el Birmingham Trichology Centre, la barba te salva de los catarros porque tiene un efecto bufanda.
6. La fiebre por ser hipster es tal que existen implantes de vello facial. En Reino Unido y en Estados Unidos distintas clínicas de estética aseguran que en los últimos años se multiplicó el número de hombres que solicitan este servicio.
7. Un implante completo de barba cuesta entre 5000 y 6000 euros y la intervención dura unas siete horas.
8. La barba te protege del sol, según un estudio de la Universidad de Southern Queensland (Australia). Los expertos colocaron a dos maniquíes con y sin barba (barbas de 3.8 y 8.8 cm) al sol. Los resultados mostraron que la barba parecía ofrecer 90-95% de protección contra el sol, en función de la longitud del cabello.
9. Los que tienen asma provocado por el polen y el polvo deberían hacerse hipsters porque la barba, y más específicamente, los bigotes grandes, ayudan a reducir los síntomas de la enfermedad.
10. La barba es mejor que el elixir de la eterna juventud porque evita que el agua salga de la piel, la mantiene hidratada y la protege del viento, que la seca y se altera su barrera protectora, según el dermatólogo Dr. Nick Lowe.