Deslumbrante, seductora, bellísima… Los adjetivos para describir a Mónica Bellucci se quedan cortos comparados con su belleza. La actriz posa espectacular a sus 49 años para la revista Elle y concede una interesante entrevista envuelta en los modelos más sexys de Dolce & Gabbana. «Tengo claro cuáles son mis pilares en la vida: la familia, los amigos y la risa», confiesa la actriz italiana. Añade que su prioridad son sus hijos y que «no puedo estar sin ellos».
La sesión de fotos tuvo lugar en un exclusivo apartamento milanés propiedad de los diseñadores Domenico Dolce y Stefano Gabbana. Allí se creó una atmósfera impregnada de glamour y lujo, perfecto para una diva irrepetible. Decoración barroca, mayordomos, guardaespaldas, un séquito de veinte personas y un retraso de dos horas son algunas de las anécdotas que se develan en el reportaje.
Sobre su belleza, Bellucci no quiere dar importancia a un físico envididado por millones de mujeres de todo el mundo. Para ella, el mejor secreto para estar bella a sus casi 50 años es estar bien consigo misma. «El aspecto más atractivo de una mujer reside en su habilidad para disfrutar de la vida y aferrarse apasionadamente al momento presente», dice la actriz.
Para ella, «la belleza es sentirse segura, femenina y feliz por dentro» y asegura que «está claro que perseguí mi sueño, e incluso ahora, como madre y esposa, sigo disfrutando con él», con respecto a su trabajo en el mundo del cine.
A pesar de llevar media vida en los platós de cine y pisar como nadie las alfombras rojas más glamurosas, Mónica Bellucci sigue manteniendo una timidez innata que la hace aún más seductora. «No he conseguido perder la timidez. Lidiar con nosotros mismos es un trabajo que nos lleva toda la vida. Pero, afortunadamente, la madurez te da más tranquilidad».