Esta medida preventiva tiene la finalidad de detectar anomalías en la red que pudieran incidir en el buen funcionamiento de las instalaciones y en la continuidad del suministro eléctrico, según ha señalado en una nota Endesa.
Así, y utilizando una cámara de termovisión y herramientas específicas, se realiza la inspección de las instalaciones en condiciones normales de funcionamiento de lo que se obtiene un registro de aquellos puntos que tienen una temperatura superior a la establecida como normal (se determina mediante comparación con otras fases de la misma instalación o por comparación con elementos homólogos). Posteriormente se analiza la gravedad de las anomalías y se concretan las acciones correctoras.
Todo ello se hace en elementos y puntos (líneas de alta, media y baja tensión, subestaciones, sistemas de protecciones y telecontrol, centros de distribución y puntos de maniobras telemandadas) considerados críticos por su relevancia en el adecuado funcionamiento del sistema eléctrico de la provincia.
Así, en la provincia de Sevilla se han examinado y/o analizado con sistema termográfico más de 135 kilómetros de líneas de alta y media tensión, cinco subestaciones (Cantosales, Empalme, Pilas, Alcores y Visos), 60 elementos de primera y segunda maniobra y 55 centros de distribución.
Estas actuaciones está contempladas dentro del Plan Invierno 2012-2013 y, junto a otras acciones preventivas, tienen la finalidad de abundar en el cumplimiento de la mejora de la calidad del suministro y el reforzamiento de la red eléctrica.