Tras la reunión celebrada este martes entre varias organizaciones vecinales y el portavoz socialista del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Espadas, en torno al destino del Plan de Ordenación Viaria del Casco Antiguo, algunos de los dirigentes de estos colectivos ciudadanos han atendido a los medios de comunicación en cuanto a la promesa del alcalde, Juan Ignacio Zoido, de derogar este documento que restringe el tráfico privado en el casco histórico.
Dolores Dávila, presidenta de la asociación de vecinos Estación de Córdoba, ha dicho en concreto a los medios de comunicación que el primer edil "no debería hacer las cosas a lo loco" pese a su anuncio de que el mencionado plan de movilidad sería derogado en el primer pleno ordinario del mandato, que precisamente se celebrará el último viernes de este mes. "Antes decíamos que no al cierre del casco histórico sin alternativas y hoy decimos que no a la apertura total sin alternativas", ha resumido Dolores Dávila, para quien tras estos meses de aplicación del Plan de Ordenación Viaria del Casco Antiguo, las restricciones "han funcionado" bien "en algunos sitios".
"Hay que recapacitar. Hay que llegar a lo óptimo y lo óptimo no es ni cerrar a cal y canto el centro, ni abrirlo como estaba antes", ha señalado Dávila señalando la necesidad de que el norte y el sur del casco histórico, por ejemplo, "estén conectados, de forma fluida, por el transporte público".
Antonio Alonso, de la asociación de vecinos Areneros de San Gil, ha secundado la posición de Dolores Dávila y ha reclamado "flexibilidad" a la hora de tratar la movilidad en el casco histórico. "Necesitamos plazas de garaje por la periferia del casco antiguo", ha señalado de hecho como una de las medidas requeridas antes de incidir sobre el actual modelo de movilidad en el centro de la ciudad.