El presidente de la Fundación Málaga Health, el doctor Miguel Such, ha criticado «el desinterés» de la Junta de Andalucía por el turismo sanitario, ya que, a pesar de las diversas peticiones cursadas para mantener una reunión con dirigentes andaluces sobre la fortaleza y la necesidad de desarrollar este segmento «no han contestado ni se han dirigido a nosotros».
Esta fundación mantiene que hay tanto interés como mercado para que este segmento sea uno de los más importantes de la Costa del Sol, y también del conjunto de Andalucía, sin embargo, «la falta de respuesta» de la Junta ha motivado un «freno» en su desarrollo.
Es más, según Such, si se apuesta por este tipo de turismo, una medida sería «recuperar a profesionales de la salud» que han tenido que emigrar y que son «perfectamente válidos para atender a esos turistas». «Tenemos que traer a la gente que hemos formado y también a turistas para que se traten aquí», ha sostenido en declaraciones a Europa Press.
La Fundación Málaga Health ha tenido también que desterrar por el momento la idea de traer directamente a pacientes a través de acuerdos con la sanidad pública de otros países europeos; de hecho, la empresa creada para ello se ha disuelto. El motivo es que en España, ha precisado, «no existen controles de calidad, no hay centros que auditen datos clínicos ni centros que te acrediten como servicios de excelencia y nos preguntaban por qué decíamos que éramos tan buenos si no estaba acreditado».
En España, según el doctor, «nadie investiga la mortalidad de un determinado tipo de cáncer en un hospital o en otro o en una especialidad de cirugía en un centro u otro; no hay acreditadores ni normas ni el Estado da ningún documento oficial».
En este sentido, la Fundación Málaga Health está abordando la posibilidad de elaborar protocolos específicos con la alemana TüW, la empresa certificadora europea más importante para acreditaciones de resultados clínicos, de manera que aquellos centros o profesionales que quieran puedan recibir dicha acreditación, «algo siempre voluntario».
Ha puesto como ejemplo el hecho de que el servicio de cirugía cardiovascular del Xanit Hospital Internacional, ubicado en Benalmádena (Málaga), es desde hace más de un año, oficialmente, hospital de referencia de Gibraltar en dicha especialidad.
«Nos pidieron lo mismo, las acreditaciones de nuestros resultados en el servicio cirugía cardiaca porque en el sistema público británico le das a un botón y ves la mortalidad de cada hospital, servicio o cirujano, es transparente y al acceso de cualquiera», ha explicado, y ha añadido que el Gobierno británico se ofreció a acreditarlo y «así se hizo y estamos en condiciones de operar enfermos de la sanidad británica».
Lo ideal, según ha añadido, sería que el Gobierno andaluz «fuera a Holanda, a Alemania o Suecia y dijera, estos son mis hospitales y mis resultados y traer a pacientes a Andalucía a tratarlos». «Falta mentalidad», ha recalcado, incidiendo en la «impresionante riqueza de la sanidad, que ha costado mucho esfuerzo, tiempo y dinero y ahora podríamos rentabilizarla», ha opinado el especialista médico.
Por todo ello, los mayores esfuerzos de esta plataforma se centran en divulgar su página web www.malagahealth.com, que incluye especialidades, procedimientos, equipos y centros médicos así como servicios turísticos. Una base de datos muy completa «para difundir en el mundo la sanidad de Málaga», todo ello para lograr «que nos conozcan por la gran sanidad que tenemos».
PLATAFORMAS
Such ha apuntado que a nivel estatal existe la plataforma Spaincares, que cuenta con una lista de hospitales privados que se proporciona a los países interesados, «que son muchos». Sin embargo, «no hay ni un centro andaluz», aunque sí de comunidades como Mallorca, Valencia, Barcelona y Madrid.
Spaincares es una alianza estratégica de los sectores del turismo y la salud en España para ofrecer los mejores servicios de salud y el disfrute de las «inmejorables» infraestructuras turísticas.
También existe el clúster empresarial Tourism&Health Spain, nacido en Málaga, una iniciativa que reúne a los principales actores tanto de la industria de salud privada como del sector turístico de la Costa del Sol. Está conformada por empresas tecnológicas, hospitales, hoteles, centros de bienestar e instituciones interconectadas en el campo de turismo de salud.
Los mercados más interesantes son los que están a unas tres horas en avión o menos: Reino Unido, Alemania, los países escandinavos y parte del mundo árabe y Europa del Este. En un segundo nivel se situarían los mercados de Estados Unidos, China o Iberoamérica.
A juicio de Such, el modelo sanitario andaluz «no es el del resto de España», y ha puesto como ejemplo centros hospitalarios concertados con la sanidad pública pero que, sin embargo, también trabajan con pacientes privados, entre los que ha citado el Clinic de Barcelona o la Fundación Jiménez Díaz de Madrid, por ejemplo.
El turismo sanitario, ha recordado, es beneficioso también para los hoteles, para el transporte, por el hecho de tener que desplazarse desde otros países; y «crea mucho empleo», ha incidido el doctor Such, quien ha agregado que Andalucía puede convertirse en «un polo de atracción muy interesante» e incluso atraer inversiones en estructuras sanitarias para instalarse en suelos de la región.
En 2012, 21.898 turistas visitaron España atraídos por el sector de la salud y gastaron 12,1 millones de euros, con un gasto medio muy superior al del turista convencional y estancias más largas, según datos de Turespaña.
Se trata de un sector con gran potencial de crecimiento, en gran medida porque más de 110 millones de europeos tienen más de 60 años, aunque su potencial en España aún es modesto, ya que apenas factura anualmente unos 140 millones, el 2,4 por ciento del total de la sanidad privada.