La exposición, según han informado el Ayuntamiento y DKV, representa a una de las líneas vertebradoras de la Colección DKV, que está adquiriendo especial peso en los últimos tiempos y que estudia el modo en que autores contemporáneos retoman en sus trabajos las posibilidades de la
abstracción y la geometría.
Emerge en estos creadores una renovada atención a la forma, y lo hace desde la variedad de formatos (instalaciones, esculturas y pintura, fundamentalmente) y con una gran riqueza de aproximaciones. Las obras abordan cuestiones que abarcan, desde la musicalidad y el modo en que se
interrelacionan ritmo y variación, color y escala, hasta el renacimiento de la línea en la pintura, pasando por derivas conceptuales de gran densidad y por una construcción de volúmenes casi arquitectónica.
La exposición incluye dos trabajos realizados ex profeso para la Sala Vimcorsa: un montaje inédito de la pieza »Hacia blanco», adaptada por el artista Guillermo Mora a los espacios del centro, y una intervención
mural de Juan Sánchez, realizada en el marco de su proyecto »Estampación portátil».
Ambas propuestas, como muchas otras de las piezas presentes en la exposición, recalcan la capacidad de la forma artística para forjar el espacio y reactivar el medio expositivo, configurando así un espectador activo, implicado y fascinado, a un tiempo, en su relación con la obra de arte.