Según ha informado la Junta, durante 12 meses los alumnos, divididos en dos grupos de 12 personas, dedicado uno a la albañilería y el otro a la carpintería, han recibido 1.920 horas de formación teórico-práctica. El taller ha contado con una subvención de 536.145 euros.
Ambrosio ha destacado el doble objetivo de estas iniciativas de formación y empleo. Por un lado, mejorar la cualificación de las personas, ofrecerles una experiencia y abrir una puerta a la inserción al mercado laboral, en el marco de especialidades y sectores con futuro, y por otro lado, generar un beneficio social en los municipios con la consiguiente mejora de la calidad de vida y revitalización de los mismos.
En esta ocasión, el taller ha realizado un proyecto de conservación del patrimonio del entorno del embalse de La Colada y a través de la construcción de una serie de instalaciones y servicios se ha dispuesto de un nuevo espacio libre en la localidad donde poder relajarse.
Durante su intervención, Ambrosio ha informado a los participantes acerca de instrumentos con los que cuenta la Junta de Andalucía, como la Fundación Andalucía Emprende o la Agencia de Desarrollo e Innovación, IDEA, para respaldar y asesorar pequeños proyectos empresariales que puedan surgir de esta iniciativa de formación y empleo.
Además, ha animado a los alumnos «a no perder de vista la perspectiva de la formación y del aprendizaje, en un momento en que la situación económica sigue siendo complicada, los cambios se suceden muy rápido y hay que aprovechar al máximo cada oportunidad que se ofrece de ampliar o descubrir nuevos conocimientos». Ambrosio ha valorado la iniciativa, el talento, las ganas de aprender y mejorar, como el mejor activo para enfrentarse al futuro.
La delegada ha señalado también la importancia de «aprovechar las potencialidades con las que cuenta la provincia, para generar en torno a ellas expectativas de desarrollo económico y social, junto al capital humano con el que contamos en cada uno de los municipios».
Ambrosio ha concluido su intervención con la idea de que «estamos obligados a generar las mismas oportunidades a los ciudadanos, independientemente del lugar en el que vivan, siendo conscientes de que en cada lugar hay recursos que aprovechar y optimizar, que tienen mucho que ver con el nuevo modelo económico por el que debemos apostar».