El polio es una infección provocada por un virus. El polio ataca los nervios y provoca una parálisis de los miembros. En función de la intensidad o la gravedad de la infección se pueden paralizar todos los músculos, incluso el diafragma y provocar la muerte.
No se trata de una enfermedad mortal. Dependiendo de la intensidad puede provocar parálisis solo de los miembros inferiores, que España es lo más habitual. El polio es una enfermedad que ya está erradicada.
Lo más importante es la vacunación ya que previene la aparición y desarrollo de la enfermedad. En España está incluida en el calendario de vacunación de los niños e implica varias dosis con el objetivo de inducir un recuerdo inmunológico. A los 6 u 8 años, los niños en España ya están vacunados.
Se contagia a través del contacto. No solo de persona a persona también a través del contacto con materiales. Una vez que existe contagio, se extiende con rapidez.
El polio no tiene cura. La cura es la prevención. Una vez que se daña el sistema nervioso, no hay tratamiento. Con la vacunación se prevé la enfermedad.
Se trata de una enfermedad que golpea a los países pobres o en conflicto. El principal motivo es que los sistemas sanitarios se interrumpen poniendo en peligro la salud de los más pequeños.