España presenta un balance muy positivo en sus enfrentamientos contra Irlanda, su rival el jueves en Gdansk en duelo del Grupo C de la Eurocopa-2012, habiendo ganado 13 de los 24, con cuatro victorias de su rival y siete empates, 48 goles a favor y 18 en contra.
El único enfrentamiento anterior en fase final de un torneo internacional fue en octavos de final del Mundial-2002, disputado en la ciudad surcoreana de Suwon, que terminó en empate (1-1), aunque la selección entonces dirigida por José Antonio Camacho, se impuso en los penaltis (3-2).
En aquel encuentro, el héroe español fue Iker Casillas, que detuvo los lanzamientos de David Connolly y Kevin Kilbane, mientras que Matt Holland lanzó su disparo al larguero.
Fernando Morientes había adelantado a los suyos en el minuto 8 y Robbie Keane empató de penalti en el 90.
Una victoria importante de la selección española se dio en Dublín en octubre de 1993, cuando España necesitaba ganar para clasificarse al Mundial de Estados Unidos de 1994. El equipo dirigido por Javier Clemente se impuso por 3-1, con un doblete de Julio Salinas.
España ya había eliminado antes en las fases de clasificación a los Mundiales de 1990 y 1966 a Irlanda, en este último caso con un partido de desempate en París.